Así avisa el infarto: reconocer los síntomas para actuar rápido
Es fundamental prestar atención a cualquier señal inusual o persistente y no ignorar síntomas
Redacción | Mallorca, 28 de Noviembre de 2024 | 16:22h

En muchas ocasiones, los infartos podrían prevenirse adoptando hábitos saludables en la alimentación, realizando ejercicio de forma regular y dejando de fumar.
Estas prácticas ayudan a reducir los principales factores de riesgo asociados, como la hipertensión, el colesterol y los triglicéridos elevados, así como la diabetes.
Además de trabajar en la prevención, es esencial reconocer de forma rápida los síntomas de un infarto y buscar atención médica inmediata para minimizar posibles consecuencias graves.
POR QUÉ SE PRODUCE UN INFARTO
El infarto ocurre cuando se interrumpe el flujo sanguíneo hacia una parte del corazón, lo que impide que este órgano reciba oxígeno y nutrientes. Si no se actúa con rapidez, el daño puede ser irreversible e incluso mortal.
El motivo más común de esta obstrucción es la enfermedad de las arterias coronarias. Esta se produce por la acumulación de placa en las paredes arteriales, lo que reduce el paso de sangre. Si la placa se rompe, puede originar un coágulo que bloquee completamente la arteria.
Cuando el corazón deja de recibir oxígeno por un periodo prolongado, las células en la zona afectada comienzan a morir, y el daño al músculo cardíaco se agrava cuanto más tiempo persiste el bloqueo.
Entre los factores de riesgo principales destacan el colesterol alto y la hipertensión. En España, se estima que más del 50% de la población adulta tiene niveles elevados de colesterol, y cada año se producen cerca de 72.000 eventos cardiovasculares vinculados a esta condición.
SÍNTOMAS DE UN INFARTO
El síntoma más común es un dolor intenso y opresivo en el centro del pecho, que puede extenderse hacia la mandíbula, la espalda o uno de los brazos, generalmente el izquierdo, aunque también puede afectar al derecho.
El malestar puede subir hacia el cuello y estar acompañado de náuseas, mareos, sudor frío y dificultad para respirar.
Aunque los síntomas principales son similares en hombres y mujeres, las mujeres suelen experimentar otros adicionales, como vómitos, mareos o un malestar general que, en algunos casos, se confunden con otros problemas menos graves.
EL DIAGNÓSTICO EN MUJERES ES MÁS COMPLEJO
Las mujeres, en ocasiones, minimizan sus síntomas o los atribuyen a estrés o ansiedad. Además, existe la percepción de que los infartos son más comunes en hombres, lo que puede retrasar el reconocimiento de las señales de alerta.
En personas diabéticas, el infarto puede presentarse sin síntomas claros y manifestarse como un simple malestar digestivo, lo que dificulta aún más su detección. De media, las mujeres tardan alrededor de 139 minutos más que los hombres en acudir a urgencias, lo que reduce las posibilidades de recibir un tratamiento oportuno.
Es fundamental prestar atención a cualquier señal inusual o persistente y no ignorar síntomas que no se hayan experimentado antes.
CÓMO ACTUAR ANTE UN INFARTO
La rapidez en la respuesta es crucial para limitar el daño al corazón y aumentar las probabilidades de supervivencia. Es importante saber que la mayoría de las muertes relacionadas con el infarto ocurren en la primera hora desde el inicio de los síntomas.
Si el infarto sucede en casa, que es el caso en el 75% de las ocasiones, lo primero que debe hacerse es llamar al 112. Este servicio activará el protocolo “Código Infarto” y gestionará el traslado al hospital más adecuado.
Es vital seguir las instrucciones de los profesionales de emergencias, ya sea esperar la llegada de la ambulancia o, si se está muy cerca de un centro médico, dirigirse directamente al hospital. Actuar sin demora puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.