Varios municipios mallorquines, entre los pueblos españoles con peor tasa de empleo

Son Servera se sitúa entre los municipios españoles con peor tasa de empleo (38,8%), según datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El municipio mallorquín se encuentra así junto a La Línea de la Concepción (35,3%) y Barbate (37%), ambos en la provincia de Cádiz. Junto a estos están los también mallorquines Capdepera (39,3%), Alcúdia (40%) y Santa Margalida (42%). Santanyí (47,3%) presenta un dato mejor.

Por otra parte, según los mismos datos, los municipios de más de 10.000 habitantes con las mayores tasas de empleo sobre la población en edad de trabajar fueron, a 1 de enero de 2022, Cuarte de Huerva (Zaragoza), con una tasa del 77,7%, Arroyo de la Encomienda (Valladolid), también con el 77,7%, y Valle de Egües/Eguesibar (Navarra), con el 75,4%.

Así se desprende de la información del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el censo de población 2022 con variables relativas a la relación con la actividad económica (activos, ocupados, parados), el nivel educativo o los estudios en curso.

El INE destaca que los ocupados aumentaron de manera generalizada entre el 1 de enero de 2022 y el mismo día de 2021. Entre los municipios con más de 10.000 habitantes, Yaiza y Pájara, en Las Palmas, presentaron las mayores subidas en la tasa de empleo, de más de 10 puntos, seguidos de Ubrique (Cádiz), con un aumento de más de siete puntos.

Por el contrario, los municipios que experimentaron los mayores descensos en la tasa de empleo fueron Palma del Río (Córdoba), Lora del Río (Sevilla) y Cantillana (Sevilla), los tres con bajadas superiores a un punto.

Entre los principales países, las nacionalidades que presentaban una mayor proporción de ocupados entre la población de 16 y más años a 1 de enero de 2022 eran la china (61,4%), la ecuatoriana (59,7%) y la boliviana (55,5%).

Por el contrario, los británicos (23%), los colombianos (33,6%) y los peruanos (37,0%) registraban los menores porcentajes de ocupados.

El INE aclara que en septiembre se incorporarán otras variables que caracterizan a los ocupados, como la ocupación, la situación profesional (asalariados, autónomos), la actividad del establecimiento y el municipio de trabajo; así como información sobre las residencias anteriores.

Los nuevos censo de población anuales, basados íntegramente en registros administrativos, mantienen todo el detalle territorial de las operaciones censales que tradicionalmente se publicaban cada 10 años, ofreciendo datos hasta sección censal. Además, permiten seguir cada año la evolución de muchas características sociodemográficas de la población, asegura el INE.